Pasado: orígenes de la organización administrativa del Turismo en Cuba
| Author | Yuri Pérez Martínez |
| Profession | Máster en Derecho Constitucional y Administrativo, Universidad de La Habana |
| Pages | 263-278 |
263
PASADO: ORÍGENES DE LA ORGANIZACIÓN
ADMINISTRATIVA DEL TURISMO EN CUBA
Yuri P M*
Reexión preliminar: a propósito de la primera
Ley de Turismo de la República de Cuba
La disposición1 que pauta los orígenes jurídicos del fenómeno turístico en
el país, nació para regular los espectáculos de habilidad, fuerza, destreza, así
como variadas distracciones de similar género en los que mediaban o se cru-
zaban apuestas mutuas o de cualquier otra clase.
Ruleta, pelota, carreras de caballos, entre otros ejercicios recreativos basa-
dos en el azar, formaban —en los años veinte— una mezcolanza irresistible
para los turistas provenientes, principalmente, de Estados Unidos. Los juegos
de suerte fueron autorizados en determinadas condiciones por la propia ley,2
en las playas veraniegas, como uno de los medios de seducción del turismo
invernal norteamericano a Cuba.3
* Máster en Derecho Constitucional y Administrativo, Universidad de La Habana. Profesor de
Derecho Constitucional del Departamento de Estudios Jurídicos Básicos, Facultad de Derecho.
Universidad de La Habana.
1 Ley de Turismo de fecha 8 de agosto de 1919 en Gaceta Ocial de la República de Cuba. Edición
ordinaria correspondiente al martes 12 de agosto de 1919, año XVIII, no. 36, tomoII, pp. 2 421
y ss.
2 Ídem.
3 Vid. L y S, Antonio: La Actividad Administrativa y sus manifestaciones, segunda
edición, Editorial Cultural S.A., La Habana, 1945, p. 474.
264
Yuri Pérez Martínez
El impulso de la voluntad política en pos de incentivar la actividad del
juego como expresión del producto turístico cubano; no se manifestó en
igual intensidad para contrarrestar las consecuencias nefastas de esta clase de
“entretenimientos”.
Desde los antecedentes de la denominada Ley de Turismo —localizados en
el proyecto4 de ley cuya esencia radicaba en la autorización a la Cuban Sport
Company para establecer un hipódromo y un frontón para el desarrollo de la
disciplina deportiva de pelota vasca— algunos advertían5 que concebir el juego
como atracción turística constituía un error.
Del análisis de las objeciones formuladas6 al proyecto presentado en la Cámara
de Representantes, se verican los intereses que en su aprobación tenían muchas
personas en el país; elemento que se demuestra en las discrepancias, en relación
con el tema en discusión, de las fuerzas políticas en el cuerpo colegislador.
Fue signicativo que el propio proyecto fuera devuelto al legislativo por
el Ejecutivo de la Nación en virtud de una atribución constitucional7 recono-
cida al primer mandatario. Tres razones fundamentales alegó el Presidente de
laRepública para argumentar ese veto: el mal afecto moral que esto produciría,
la carencia absoluta de subasta y la mengua de los ingresos de la renta de la lote-
ría por las apuestas que el resto de los juegos generaban. Sin embargo, al presen-
tarse a la Cámara la acción presidencial, se adujo que el motivo principal que
4 Discutido en la sesión del 5 de septiembre de 1912 en la Cámara de Representantes a través de
la Comisión de Peticiones y Concesiones.
5 “El proyecto de ley que se está discutiendo en el Congreso, concediendo a una Compañía el
derecho de celebrar partidos de JAI ALAI y carreras de caballos, será, si prospera, un fracaso”.
Carta manuscrita en inglés dirigida a Ignacio R (Palacio Presidencial) por S.S. H,
referente a la conveniencia de abrir un club para atraer turistas, La Habana, 14 de agosto de
1912. Documento del Archivo Nacional de Cuba, Fondo: Secretaría de la Presidencia, Caja
No.85. Signatura 12.
6 Entre las personas que se pronunciaron en contra del proyecto de ley citado, destaca la que en
su día prorió L: “… aquella cuestión del fomento del turismo no era más que el todo y
esto era una parte. Aquella cuestión puso realmente en peligro el crédito del Poder Legislativo
(…) Cuando existía el JAI ALAI entre nosotros, constantemente se estaba dando cuenta por los
periódicos de los daños que hacía; los diarios publicaban retratos e informaciones de dependien-
tes de comercio que se quitaban la vida agobiados por las pérdidas que habían sufrido en aquel
juego; en distintas ocasiones llegaron a opinar distintas personas de diferentes categorías políticas
y social, que como era un derecho adquirido, un acto consumado un acto denitivo que no había
más remedio que esperar que pasara la concesión para no votarla más y poniendo la administra-
ción cubana frente a frente de la administración americana, nos dábamos el gusto de hablar mal
del General Wood (…) simplemente porque demostró entusiasmo por el sport vasco, como sport
no como medio de apuestas (…) considerarlo una plaga nacional, estimar que era una calamidad
que había que destruir, sin sospechar nadie que era un ave fénix destinada a resucitar por nuestras
mano s”. G L, José A.: “Discurso pronunciado cuando en la sesión del 5 de agosto
de 1912 se puso en discusión el proyecto de ley de la Comisión de peticiones y Concesiones”, en
Discursos y trabajos del Dr. José A. G L, Editorial Cámara de Representantes de
la República de Cuba, La Habana, S/F, pp.854-855.
7 Cfr. artículo 62 de la Ley de leyes de 1901.
To continue reading
Request your trial